jueves, 13 de febrero de 2014

Amor difuso


Se me olvida..

Los meses fueron pasando, y el presente paso a ser pasado quizá demasiado rápido

Alimentar la maquinaria pesada que me hace moverme, abrir la jaula y dejar volar los pájaros, nos hacemos ya mayores para poder seguir llamándonos soñadores, si se alimenta lo de arriba se afina lo de abajo, o al menos ya me gustaría que así fuese, el caso es que estoy, no se sabe con que tipo de arrendamiento, para poder acercarse a la luz conviene no tirarse de lleno a la hoguera, y si la dicha es buena nunca es tarde.

¿tiene sentido?

Pues claro que no

¿no es verdad ángel de amor, que en esta apartada orilla tu piel brilla pero tu pasado sombrilla?
sal de mi vida! hizo oídos sordos y respondió, pimienta de mi corazón, los valientes saltaron sobre la granada cuando alguien dijo: -cuerpo a tierra! en ese momento el Fenix sobrevoló las torres de arcilla y barro, se pregunto si planear para destruirlo todo o hacer un circulo mas extenso para contemplarlo  desde otro ángulo, como dijo Heidegger la nada nadea, y quien sabe si nadeando el Fenix recordó el viejo cuento que así decía:

Un viejo cacique de una tribu estaba teniendo una charla con sus nietos acerca de la vida.   

Él les dijo: 
Me siento como si tuviera dos lobos peleando en mi corazón; uno de los lobos es ira, envidia, sufrimiento, culpa, resentimiento e inferioridad. El otro está lleno de amor, fuerza, voluntad, humildad,  serenidad y armonía. 


Esta misma pelea está ocurriendo dentro de vosotros y dentro de todos los seres de la Tierra...

Uno de los nietos preguntó: 
Abuelo ¿cuál de los lobos ganará la pelea?


El viejo cacique respondió... "Aquél al que yo alimente"